Un royalty energético, al igual que el impuesto aplicado a la gran minería, es lo que propone el alcalde de Calama, Esteban Velásquez, a todos los proyectos de este tipo que se instalen en la zona norte del país.
En la actualidad, en la comuna nortina existen 19 proyectos, entre plantas fotovoltaicas y eólicas, aprobados ambientalmente por US$ 3.348 millones y 1.500 MW.
Según Velásquez, "no hay oposición al desarrollo de este tipo de iniciativas, pero sí es necesario regular el aporte de estos a la comunidad, porque la energía va destinada en gran medida a la industria minera y la población solo ve cómo se ocupan los terrenos y el patrimonio del desierto (...) Además, es necesario que los terrenos donde se instalan sean sociabilizados con la población".