Si alguien afirmaba a inicios del 2014 que el petróleo pasaría de valer más de US$100 a estar por debajo de los US$40, nadie le hubiera creído.
Sin embargo, para sorpresa del mercado y de analistas, esto ocurrió. Y hoy es una de las materias primas más golpeadas en lo que va del 2015. En poco más de un mes, el petróleo acumula retrocesos de 23%, siendo el WTI el que lidera estas caídas.
Gran parte de estos descensos obedecen a la decisión del viernes pasado de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep) de no recortar su producción para el 2016. Incluso más, advirtieron que en la medida en que Estados Unidos levante las sanciones contra Irán, este actor podría aportar 500.000 barriles diarios de crudo.
Esto, sumado a los 30 millones de barriles (mdb) por día de la Opep y los 9 (mdb) que produce Estados Unidos, no hacen más que mostrar la saturación que vive el mercado, producto de una alta dosis de oferta y una débil demanda.
Según la Agencia Internacional de Energía (AIE), el crecimiento de la demanda mundial de petróleo será el próximo año de 1,2 mdb, por debajo de los 1,3 mdb previstos para el cuarto trimestre de 2015 y lejos del incremento de 2,2 mdb registrado entre julio y septiembre.
El consumo probablemente haya tocado techo en el tercer trimestre y se espera que el crecimiento de la demanda se ralentice hasta todavía 1,2 mbd en 2016 a medida que empiece a disminuir el respaldo de las pronunciadas caídas de precios de crudo, prevén los expertos.
José Ignacio Villarroel, de IM Trust, considera que la Opep "es el embrague para mantener los precios a largo plazo". Y advierte que con estos niveles de producción, probablemente se verán dañadas las cuentas fiscales. Sin embargo, interpreta que la decisión del cartel lo que hace es priorizar la participación del mercado.
Más allá de la medida de la Opep, Villarroel considera que "esperar niveles de precios del crudo por debajo de los US$40 para el 2016 es inviable para el mercado".
El viernes, el barril de WTI, referencia para el mercado chileno, cerró a US$35,62 y registró una variación diaria de -3,10%. Mientras que el de Brent culminó la operativa en US$38,32, retrocediendo 4,51% respecto del jueves. En ambos casos, se ubica en mínimos desde el 18 de febrero de 2009 para el WTI y desde el 24 de diciembre de 2008 para el Brent.
Impacto en los mercados
Los fuertes descensos que han mostrado los precios de las materias primas en lo que va del año han despertado una señal de alarma a nivel global. Sobre todo porque dejan entrever que una baja demanda de commodities supone un menor crecimiento de la actividad económica.
Incluso el viernes, las bolsas europeas cerraron su operativa en torno a mínimos de dos meses, preocupadas por los reducidos valores del petróleo, pero también con la mira puesta en la reunión de la Reserva Federal del próximo 16 de diciembre, donde parece inminente un incremento de las tasas de interés.
De concretarse esto, el dólar a nivel internacional se podría apreciar aún más y esto hundiría a los commodities que se transan en dólares, entre los que está el cobre, fundamental para Chile.
Ante este escenario, la AIE advierte que un precio bajo del petróleo durante un período prolongado "no generará necesariamente beneficios para los países importadores en el largo plazo, ya que podrían dificultar la transición a una economía de bajas emisiones".